Cuanto más a la derecha, la historiografía sobre la Guerra civil da verdaderamente grima. Nada más tenemos que leer a Payne, que ha dicho que en el 36 no hubo un golpe de Estado y que Franco merece una calle por haber ganado la Guerra Civil. El caso es que cuanto mas nos acercamos a la extremaderecha, la historiografía sobre la Guerra Civil da vergüenza.
Juan E. Pflüger, es un periodista que escribe para el diario ultraconservador, La Gaceta. En ese diario tiene un blog, Crímenes del Comunismo, donde deja sus sesudas reinterpretaciones sobre temas que parece desconocer, o al menos, lo que allí se refleja no concuerda con la verdad. Estos días Pflüger publicaba un artículo sobre la memoria histórica de la izquierda:
"...en la visión sesgada con la que se está aplicando [la ley 52/2007] se comete el importante agravio de mantener las calles, monumentos, menciones y todo tipo de reconocimientos a quienes sí fueron criminales. Es más, sus crímenes fueron cometidos para extender el comunismo, la ideología política en cuyo nombre se han cometido los mayores crímenes conocidos en la historia de la humanidad".Aquí ya se esta faltando a la verdad: los crímenes de la izquierda se ejecutaron en el contexto de una guerra civil, nada de expander ninguna ideología. Pero lo lamentable del artículo son los manidos tópicos que la derecha sigue usando:
- Santiago Carrillo, el responsable de Paracuellos
- La pasionaria, la mujer que condenó a muerte a Calvo Sotelo
- Indalecio Prieto, El socialista que asesinaba a la sombra
- Largo Caballero, el Lenin Español
- Rafel Alberti, un poeta de los paseos y las purgas
- Lluys Companys, el impulsor del separatismo violento
- Margarita Nielken. una represora formada en la URSS
- Juan Negrín, el hombre que robó el oro de Moscú
- Las Trece Rosas, terroristas adoradas por la progresía.
- Brigadas Internacionales, voluntarios para asesinar españoles.
No se pueden escribir mas tontadas en tas pocas frases: un compendio de lo que ha sido y es la historiografía franquista. Que Santiago Carrillo no se haya podido sacudir el fantasma de Paracuellos, no significa que fuera "el responsable de las sacas de Paracuellos. A la Pasionaria la dejamos para el final. De todos es conocido la frase de Prieto: "no los imitéis", en relación a los asesinatos de las izquierdas. A Largo Caballero le pusieron el mote de "el Lenin español", un mote que no le gustaba nada y que pensaban que provenía de sus enemigos políticos. Gracias a Companys salvaron la vida infinidad de religiosos; se calcula que la Generalitat logró sacar de Cataluña a más de 6.000 personas. La mentiras sobre Margarita Nelken se deben a la ultraderecha y algo ayuda de los anarcosindicalistas como Juan García Oliver, que en sus sesgadas memorias acusaba a Nelken de represora. Sobre el "oro de Moscú", parece de chiste que se siga incurriendo en tremenda estupidez decir que Negrín robó ningún oro. Las armas se compran con dinero, y el oro español, que no de Moscú, se convirtió en divisas para financiar la Guerra Civil. Las Trece Rosas no habían cometido ningún asesinato. Estaban en la Cárcel cuando asesinaron al coronel Isaac Gabaldón, a las Trece Rosas no se las puede imputar ningún crimen. La Brigadas Internacionales fueron idealistas que vinieron a detener al fascismo internacional.
Volvamos sobre la Pasionaria."Este hombre ha hablado por última vez", esta frase premonitoria se le achaca a Dolores Ibarurri, y que según todo el facherio fue lanzada contra José Calvo
Sotelo, señalando así, para que las hordas del comunismo lo asesinaran sin piedad. En realidad los asesinos de Calvo Sotelo a por quien salieron fue a por Gil Robles, como este se encontraba fuera de España decidieron ir a por otro líder de las derechas con mucha relevancia dentro de su partido y en los medios de la ultraderecha, es decir, Calvo Sotelo fue víctima de la propia fatalidad, amen de los mismos asesinos. Pero es mentira, la pasionaria no pronunció aquella famosa frase, que nadie, por cierto, recogió en su propio día.
Sotelo, señalando así, para que las hordas del comunismo lo asesinaran sin piedad. En realidad los asesinos de Calvo Sotelo a por quien salieron fue a por Gil Robles, como este se encontraba fuera de España decidieron ir a por otro líder de las derechas con mucha relevancia dentro de su partido y en los medios de la ultraderecha, es decir, Calvo Sotelo fue víctima de la propia fatalidad, amen de los mismos asesinos. Pero es mentira, la pasionaria no pronunció aquella famosa frase, que nadie, por cierto, recogió en su propio día.
El historiador Alejandro Sánchez Moreno, lo aclara para eldiario.es:
Atendiendo sólo a estos datos, resulta del todo imposible sostener desde el rigor histórico la versión franquista de la amenaza de la Pasionaria a Calvo Sotelo, habida cuenta de que la prueba más sólida con la que parecen contar es el testimonio de Tarradellas que, como hemos visto, se contradice con el expuesto por otros parlamentarios. Si a todo esto le sumamos el hecho de que la historia de la amenaza de la dirigente comunista no surgió hasta después de muerto Calvo Sotelo, todo parece indicar la construcción a posteriori de una ficción que venía como anillo al dedo a aquellos que decidieron levantarse en armas contra el régimen legalmente constituido.
Cualquiera que se haya aproximado a la investigación de esta etapa de nuestra historia contemporánea con un mínimo de seriedad, sabe que no es posible adjudicar responsabilidades a la Pasionaria o al PCE en el asesinato de Calvo Sotelo. No sólo la falta de pruebas hacen insostenibles esta teoría, sino que además, aquella inoportuna acción entraba en contradicción con la táctica política del PCE del momento, que creía que era necesario evitar cualquier conflicto que pudiese desestabilizar la República. Así, si bien los comunistas eran partidarios de una respuesta contundente del gobierno contra las derechas que ya calificaban de golpistas, no defendían en ningún caso el atentado individual como instrumento, pues se entendía que estos creaban el ambiente propicio para que las derechas pudieran poner en peligro a la República... Artículo completo