!Invocan la búsqueda de la verdad, pero admiten que es imposible conocerla; apelan al progreso de los pueblos, pero ellos son un club oligárquico donde cuatro espabilados deciden lo que nos conviene a los demás; presumen de libertad, pero su estructura interna no admite el menor atisbo de disidencia y su filosofía política es puro despotismo ilustrado anclado en el siglo XVIII. Sólo les faltan las pelucas empolvadas"
Cuando ha dicho eso de: "son un club oligárquico donde cuatro espabilados deciden lo que nos conviene a los demás, les puedo asegurar que me creí que estaba hablando del Vaticano. Pero cuando seguí leyendo me dí cuenta que no, la iglesia no se ha quedado anclada en el siglo XVIII, algunos siguen en la Edad Media. Es imposible decir tantas mentiras en tan pocos renglones. Para conocer bien la masonería no hay que acudir a Ricardo de la Cierva, si queremos adquirir cualquier tipo de conocimiento histórico es mejor dejar los libros de don Ricardo en los anaqueles de las librerías. Pedro Sainz Rodríguez ministro Educación Nacional en el primer gobierno del dictador Francisco Franco de 1938, según cuentan se opuso a la Ley para la Represión del Comunismo y la Masonería junto a monseñor Cicognani y el conde de Rodezno. Una vez la Bestia estiró la pata y las libertades volvieron a España el propio Sainz Rodríguez le pidió al jesuita Benimeli un estudio profundo sobre la masonería. En una entrevista que concedió el exministro franquista a Ángel María de Lera a propósito de la legalización en España de la masonería en 1979, dijo:
Por eso pensé que debería escribirse una verdadera historia sobre la masonería y, encargue ese trabajo al padre jesuita Ferrer Benimeli, una historia sobre la masonería, científica, bien hecha, sin apasonamiento, que ha publicado la Fundación Universitaria, con una bibliografía exaustiva sobre el tema. De modo que el que quiera conocer la verdad sobre la masonería no tiene más que leer la obra de Banimeli.El que no pueda acudir a la obra del jesuita Benimelli aquí tiene una conferencia de más de una hora:
La masonería ni fue tan nefasta ni tan influyente. Aquí en España a pesar de ser una asociación poco numerosa en comparación con Inglaterra o Francia a fue perseguida por la paranoia de un loco durante y después de la Guerra Civil.
El famoso y falso conturbernio judeo-masónico-comunista fue un invento del libelo Los Protocolos de los Sabios de Sión. En España hizo una versión comentada el fascista y anti-semita Onésimo Redondo, el creador de las JONS. En esa edición compartía las tesis nazis de que los judíos estaban controlando el Mundo. La extrema derecha se creía a pie juntillas lo que allí se leía. Franco era uno de sus asiduos lectores -debió de ser de los pocos libros que se leyó el "menda"-. Se ha llegado a decir que Franco estaba resentido con la masonería por no haberlo aceptado. Creemos que eso es parte de la leyenda que rodea a Franco, no hay pruebas fehacientes al respecto. Su padre y sus dos hermanos si fueron masones, Pacón y uno de los tripulantes del legendario Plus Ultra, el aviador republicano Ramón. El caudillo era un producto de la manipulación de la extrema derecha integrista de ahí esa animadversión al comunismo el liberalismo, la democracia y a la masonería. Onésimo redondo escribió en su panfleto fascista:
"El Parlamento es la agonía de la Patria, la constitución masónica un grillete para las aspiraciones nacionales y los partidos políticos el cáncer del pueblo como lo fueron siempre. " (Libertad. 19 -11 -34).
Este pensamiento era mayoritario en el ejército golpista y en los sectores más radicalizados, después durante la guerra este pensamiento logró asentarse durante 40 años más. Ese mismo pensamiento sigue vivo en los neofascistas y neofranquistas de hoy en día.
Durante la Guerra Civil había continuos llamamientos al exterminio de los masones. El periódico Amanecer de ideología falangista escribía:
"Es tal el dato de esta sociedad perniciosa, que no pueden la masonería ni los masones quedar sin un castigo ejemplarísimo. Castigo ejemplar y rápido es lo que piden todos los españoles para los masones, astutos y sanguinarios. Hay que acabar con la masonería y los masones"
Esto era publicado el 19 de septiembre de 1936, el 2 de septiembre otra publicación andaluza que predicaba la misma ideología, El defensor de Cordoba, publicaba:
"todo va bien gracias a Dios... Pero el triunfo no será completo, definitivo, ni estable, mientras exista la masonería en nuestra España y para que aquella desaparezca ¿qué hacer? Preguntad a Mussolini"
No hacia falta preguntar ni a Mussolini, ni a Hitler, ni a nadie, ellos sabían muy bien como acabar con la masonería, o en su defecto con los masones. Franco ni acabó con la masonería, ni con la izquierda, ni dejó una España prospera y reconciliada. Franco atenazó a todos los españoles mediante una asfixiante dictadura. La reconciliación se produjo porque a pesar de que Franco siempre dividió a los españoles entre vencidos y vencedores, no tenía sentido albergar rencor durante toda la vida. No hay que ser católicos para saber perdonar. La izquierda siempre ha sabido perdonar. La derecha siempre ha sido rencorosa. No han quedado contento con el resultado de la investigación del 11-M y quieren que se siga investigando. No soportaron que apearan al PP de la Moncloa debido a un atentado terrorista, que decían que había sido ETA, y que los terroristas vascos jamás han reivindicado. Un atentado que investigó la policía de don José María Aznar, no olvidemos que llevaban ocho años gobernando y cuatro con mayoría absoluta. La derechona de siempre.
Alfonso Basallo en el artículo que ha inspirado esta entrada es de la opinión que no se puede entender la historia moderna sin ver la influencia de la masonería:
Lo cierto es que su influencia política ha sido decisiva en los dos últimos siglos, singularmente en el Nuevo Mundo, donde la independencia de la Corona española hubiera sido impensable sin la masonería. A ejemplo de George Washington, con la revolución norteamericano, Bolívar y San Martín hicieron lo propio en Venezuela-Colombia y Argentina-Chile respectivamente. Todos ellos de o bediencia masónica.
Este profesor periodista cae en los errores que cometen todos los anti-masones. Para debatir las incongruencias en las que siempre incurren los supuestos liberales anti-masónicos, recurriremos al libro de Agustín Celis Sánchez, Los masones, pag. 47:
¿Qué Benjamin Franklin, George Washintong y Thomas Jefferson , fueron masones? Conclusión: la revolución americana fue un parto masón. ¿Qué entre los exaltados de la toma de la Bastilla, el comité de salvación pública y el reinado de terror había masones, con Desmoulins Robespierre y Danton a la cabeza? La revolución francesa fue un nido de conspiradores masónicos. ¿Qué el inventor de la guillotina fue un adepto masón? El registro de sangre que corrió a cargo del criminal aparato es responsabilidad de la masonería. ¿Qué los mariscales de Napoleón eran hermanos masones? La expansión napoleónica le debe mucho a la "secta". ¿Qué Rafael de Riego coqueteó con las ideas de la orden? El trienio liberal derivado de su levantamiento en las Cabezas de San Juan fue una conspiración de los Hijos de la Viuda. ¿Qué Garibaldi se inició en la masonería? La unificación italiana encontró en las logias su más ferviente defensora. ¿Qué Simón Bolivar tuvo relaciones con las logias Latauro? La independencia de las colonias americanas fue obra también. de esta intrigante institución. Y así todo.
A estos endebles argumentos recurren tantísimos estudiosos para explicar la historia de los pueblos. No a los intereses y a las pasiones políticas. No a los fanatismos generalizados. No a la exaltación patriotera de los pueblos ya las malas gestiones de sus gobernantes. Y las lecturas tendenciosas y parciales que se hacen de estos hechos resultan tan patéticas que causan sonrojo. Por su parte los propios apologistas de la masoneria han contribuido de manera apasionada a esta interpretación tan simplona de la historia. También ellos esgrimen la lista de masones ilustres y cantan las alabanzas de susactos, pero nunca comenta que clase de vínculo unió a los protagonistas con la institución (...)
(...)Tal vez se tendría que añadir en los censos de Masones famosos, además de su nombre y apellido el número de veces que asistieron a las reuniones y a los trabajos que realizaron para la Orden. Porque mientras esa información no salga a la luz, lo que impone la razón es tratar de comprender los comportamientos humanos como tales comportamientos (...). Si George Washintong (...) tuvo un destacado papel durante la guerra de Independencia estadounidense, de ningún modo pueden ser achacables sus méritos a su condición de masón (...). Simón Bolivar, prototipo de Masón adepto a la Orden y heroe de la emancipación de los países de la America del Sur. Su condición de masón queda un poco ensombrecida (...), en 1828 prohibió la masonería, junto al resto de las sociedades secretas...Tambien hubo grandes científicos y grandes músicos y artistas de toda índole que fueron masones tales como Ramón y Cajal, Mozart, Louis Armstrong o Harry Houdini. ¿También había una conspiración judeomasónica para que la sociedad avanzase culturalmente? El problema radica en la visión sesgada que tiene cierto sector ultra-derechista y ultra-católico de los masones. Se habla mucho del anticlericalismo de los masones, pero muy poco de la antimasonería clerical. el sr. Alfonso Basallo debe pertenecer a este grupo de "ultras":
Como revela Maurice Caillet en su libro, la ley del aborto aprobada en Francia, a comienzo de los años 70, salió adelante gracias a diputados masones (¡atención!: tanto de izquierda como de derecha). Y a nadie se le ocultan los vasos comunicantes entre movimientos masónicos como la Fundación Ferrer Guardia y el laicismo agresivo de los Gobiernos de Zapatero.Otra vez tenemos a los peligrosos masones creando leyes sectarias para dominar a la humanidad. En realidad podríamos cambiar las tornas y hacer una interpretación de la historia a la inversa ¿Quienes han creado grandes guerras en nombre de Dios? ¿Quién impuso la religión católica como única religión posible y prohibió la masonería? ¿Que señores del Opus Dei, en la actualidad están influyendo para acabar con el aborto? - en este enlace hay un interesante artículo sobre dos miembros del Opus que están infiltrados para acabar con el aborto. Hacer clik aquí...- ¿Quienes quieren acabar con los derechos de los homosexuales? ¿Quienes quieren que los crucifijos sigan presidiendo las aulas de las escuelas públicas? En definitiva, ¿quiénes quieren acabar con el laicismo? Los laicos no queremos acabar con la religión.
El Comité de Bioética que asesora a Ana Mato está dominado por católicos, uno de ellos por ejemplo no es partidario de la píldora del día después porque en algunos casos puede ser abortiva. Esto energúmenos radicales se oponen al aborto incluso hasta a los dos días de ser fecundado el óvulo de la mujer.
Yo no me había enterado pero debo de ser masón. Estoy a favor del aborto -siempre dentro de unos límites. Pongamos como ejemplos a Francia o a UK.-, estoy a favor del divorcio, de un Estado laico donde se respeten todas las religiones, del matrimonio entre las personas del mismo sexo, de que la religión se enseñe en los templos y en centros católicos. La leyes no obligan a abortar a nadie. Están ahí para quienes quieran hacer uso de ellas. Ninguna ley obliga abortar a nadie, ninguna ley obliga a que dos hombres o dos mujeres se casen, ni tampoco hay leyes absolutistas que obliguen a usar condones o a divorciarse. Pero la iglesia si quiere que salgan leyes que impidan que NADIE aborte -sea o no católico- que NADIE use condones -sea o no católico-, que NINGÚN homosexual se case-sea o no católico-, que NADIE se divorcie -sea o no católico-. La iglesia es totalitaria y las leyes laícas -o como dirían los ultras, las leyes masónicas- son DEMOCRÁTICAS. Mucho me temo que la conspiración no es judeo-masónica es vaticánica-derechista. Desde tiempos inmemoriales la iglesia siempre formó parte del Estado y cuando hubo separación de poderes la iglesia a influido o ha intentado influir enormemente en las decisiones políticas de los gobernantes. Yo no conozco ningún Estado masónico: donde todos sus miembros sean masones y se rijan por leyes masónicas. ¿Alguien conoce algún Estado donde todos sus miembros sean católicos y se rijan por leyes católicas? Bingo caballero. El Vaticano.
Quiero finalizar apuntando que se le podrán achacar muchos males a Zapatero, pero jamás el ser anticlerical. Y mucho menos el ser masón. Y si fuera masón qué diantres pasaría. El sacerdote Manuel Guerra Gómez, experto en sectas -experto según él- cree que esta sociedad relativista y laicista demuestra que la masonería está infiltrada en el PP y el PSOE. ¿No sabemos cuantos masones hay en el PP o en el PSOE..., pero ¿cuántos miembros del Opus hay en el PP? Esperemos que el nuevo Papa traiga algo de cordura y modernidad a estos "curitas" anti-marxistas y antimasónicos y de una vez por todas haga desaparecer la Tradición clerical que sigue inamovible por los siglos de los siglos. El Papa Francisco en unas declaraciones recientes dijo que los estados deben ser laicos para que puedan convivir TODAS LAS RELIGIONES:
“La convivencia pacífica entre las diferentes religiones se ve beneficiada por la laicidad del Estado, que, sin asumir como propia ninguna posición confesional, respeta y valora la presencia del factor religioso en la sociedad”.Uno no se fía de nadie. ¿Corren nuevos tiempos para la Iglesia? Solo el tiempo lo dirá...