Por fin han sacado al sátrapa de su maldita tumba faraónica. Lamentablemente ha sido un acto excesivamente respetuoso -y a la vez esperpéntico- con quienes jamás se han merecido tal respeto. La familia no merecía esa excelente consideración que ha tenido Pedro Sánchez con ellos
El prior del Valle de los Caídos, la FNFF, la familia, grupúsculos neofranquistas, y fascistas de distinta ralea tachan la exhumación del dictador como si de una profanación se tratara. ¿La imagen de arriba apunta acaso a que la exhumación ha sido una profanación? Profanar tumbas es, además de una falta de respeto, un delito tipificado en el Código Penal, con penas de prisión y multas. Ya que los defensores de los dictadores están tan acostumbrados a presentar demandas en los juzgados, ¿porque no denuncian al Gobierno en esta ocasión? Sería tan solo una denuncia más de las tantas que han presentado en defensa de Franco.
Un gran respeto -excesivo- ha tenido el Gobierno de Pedro Sánchez con la momia y con los familiares de Franco, como se ha podido comprobar en todas las imágenes que hemos visto en la exhumación del Valle de los Caídos. ¿Profanación?
Pudimos observar como la familia portaba el féretro de la momia cubierto con una bandera con la Cruz Laureada de San Fernando, distinción que se otorgó a sí mismo el dictador y criminal; detrás iba una comitiva compuesta por el resto de familiares y el monje Santiago Cantera, que lucía su talar más lujoso. ¿De verdad que se puede seguir manteniendo que eso fue una profanación?
Para la prensa "liberal" sí lo fue:
Sé que me entienden cuando digo que el diario digital de Losantos en un medio liberal. Ya sabemos que todo el espectro de derechas, desde C´s hasta Vox, se sienten muy molestos cuando hablamos de la realidad del franquismo, prefieren mirar para adelante y nos recuerdan la Transición, la reconciliación, y no sé que estupideces más que no tienen nada que ver con arreglar los errores cometidos en un pasado bastante cercano. Un Gobierno tiene muchos ministerios, es decir, se pueden hacer muchas cosas a la vez.
Sí la exhumación de Franco ha entrado de lleno en la campaña es por culpa de la familia Franco y por el Tribunal Supremo. También la sentencia del Procés ha entrado en plena campaña y eso a la derecha parece no molestarle. Es lógico, saben que les beneficia.
Pedro Sánchez hizo bien en no tomarse la exhumación como una especie de revancha y tratar con la máxima dignidad la momia de Franco, lo que hizo mal fue dejar que los Franco instrumentalizaran el acto y se hicieran pasar por las víctimas que nunca fueron. ¿Víctimas ellos? ¿Acaso la fortuna de la que gozan no tiene un pasado corrupto?
El féretro tuvo que haber salido de la Basílica del Valle de los Caídos con ayuda de la funeraria contratada para tales menesteres, en presencia de una representación del Gobierno y otra de los familiares, y nada más. Tampoco el prior, Santiago Cantera, pintaba nada allí, así se habrían evitado esos ¡Viva España! ¡Viva Franco! Otra cosa bien distinta es permitir todo el boato que se quisiera en la inhumación: como la exaltación franquista esta permitida por ley, nada se puede hacer por evitar que tantos fachas hagan alardes público de un irredento fascismo.
No podemos alabar a los presos de la ETA que no mataran nada si lo comparamos con los asesinatos de la posguerra, pero Franco... Franco es otra cosa. Y es otra cosa porque LA DERECHA SIEMPRE HA DEFENDIDO AL DICTADOR, y parece que la izquierda -la izquierda del PSOE- nunca va a librarse de ese complejo de inferioridad. Ya pasó con la Ley de la memoria histórica, les salió una ley muy tibia que no quería molestar al PP; el PP se molestó, como no se iban a sentir incordiados con un pasado que les es fastidioso. El PP viene directamente de ministros franquistas, de gente que colaboró con Franco y que veían el 18 de julio necesario.
Ahora con la exhumación de Franco pasó lo mismo. Se han molestado, y para colmo están llamando profanador a Pedro Sánchez, pero a su vez también están llamando profanadores a los jueces del Tribunal Supremo que avaló la exhumación, y al Congreso de los diputados que aprobó por mayoría la iniciativa de sacar a Franco de Cuelgamuros.
Que nadie se extrañe, esto pasa en el país donde los fascistas ganaron una guerra y que ahora quieren ganar la democracia. Caspa, mucha caspa se sigue supurando en la España cateta.